Una marquesina de autobús antivandálica es una estructura diseñada para proteger a los usuarios del transporte público mientras esperan el autobús, y que está especialmente fabricada para resistir actos vandálicos, impactos intencionados y condiciones climáticas adversas.
A diferencia de una marquesina convencional, una marquesina antivandálica está construida con materiales de alta resistencia, como acero galvanizado, vidrio de seguridad (PMMA o templado) y fijaciones reforzadas. Su diseño prioriza la durabilidad, la seguridad y la reducción de costes de mantenimiento, siendo ideal para entornos urbanos, zonas industriales o lugares donde el mobiliario urbano sufre un uso intensivo o ataques frecuentes.

Características clave de una marquesina antivandálica:
- Estructura robusta: fabricada con perfiles de acero de gran espesor y refuerzos adicionales.
- Materiales resistentes al impacto y al fuego, como chapa de acero, cristal antirotura o plásticos técnicos.
- Fijaciones reforzadas: tornillería de seguridad, anclajes antivandalismo y sistemas de unión ocultos.
- Diseño funcional y seguro: sin elementos que puedan desprenderse fácilmente o ser usados para dañar la estructura.
- Mínimo mantenimiento: pensada para reducir los costes de reparación y conservación a largo plazo.
¿Por qué se utilizan marquesinas antivandálicas?
- Para proteger a los usuarios en zonas de alta afluencia o con riesgo de vandalismo.
- Para garantizar la durabilidad del mobiliario urbano sin necesidad de reparaciones constantes.
- Para mejorar la percepción de seguridad y orden en los espacios públicos.
- Para reducir costes municipales asociados a roturas, grafitis y sustitución de elementos dañados.
¿Dónde se suelen instalar?
- En ciudades con alto tránsito peatonal o histórico de vandalismo.
- En áreas periféricas o barrios con menos vigilancia.
- En zonas industriales, rurales o de difícil acceso para servicios de mantenimiento.
- En terminales de autobuses, intercambiadores o estaciones interurbanas.
En resumen:
Una marquesina de autobús antivandálica es una solución resistente, segura y económica a largo plazo para proteger tanto a los usuarios del transporte público como a la infraestructura urbana. Gracias a su diseño técnico y materiales reforzados, asegura una larga vida útil incluso en los entornos más exigentes.